Un fábrica de sillas de oficina es un lugar donde confluyen todas las piezas que componen una silla de escritorio ergonómica. Esto incluye el armazón esquelético de la silla, un asiento acolchado y acolchado y un respaldo que está cubierto con tela de tapicería. Es mucho trabajo, pero el proceso puede tardar hasta cuatro o cinco semanas en completarse.
Si bien la estructura esquelética de una silla de oficina ergonómica se puede fabricar con muchos materiales diferentes, la mayoría de los fabricantes utilizan acero como base. Esto se debe a su resistencia y durabilidad, así como al hecho de que es relativamente económico. Otros materiales comunes incluyen madera, aluminio y plástico. Algunos fabricantes incluso ofrecen modelos que tienen reposabrazos, bases y ruedas construidas en acero inoxidable.
Después de la Segunda Guerra Mundial, la investigación ergonómica adquirió una nueva importancia y nació la silla de oficina moderna. Los elegantes diseños de Charles y Ray Eames reflejaron esto, al igual que la Group Chair de aluminio que fue diseñada para Olivetti. Estas sillas incorporaron un asiento giratorio y ruedas, lo que permitió a los trabajadores administrativos permanecer sentados mientras accedían a múltiples ubicaciones dentro de su oficina. Si bien las ruedas de estos modelos podían dañar algunos pisos, permitían que un trabajador girara y se moviera fácilmente entre diferentes escritorios o estaciones de trabajo sin tener que pararse.
Una vez que se termina el marco del esqueleto, un trabajador construye la base del asiento. Esto comienza soldando tubos de acero doblados de calibre 14 en un marco. Luego sujetan resortes sinuosos a lo largo del marco para proporcionar un soporte flexible para el asiento y el respaldo. También añaden un panel de aglomerado, que se reviste de espuma y se cubre con la tapicería elegida. Un trabajador también construye la estructura trasera, que incluye soporte lumbar y reposabrazos. El paso final es combinar los marcos del respaldo y del asiento.
Sentarse por largos periodos de tiempo en una silla mal colocada puede causar problemas de espalda y cuello. Por eso es importante elegir una silla de oficina cómoda y de apoyo. Esto es especialmente cierto para las personas que trabajan desde casa y necesitan pasar mucho tiempo frente a sus computadoras. Una silla de computadora de calidad puede ayudarlo a mantenerse productivo y reducir el dolor en la parte inferior de la espalda y el cuello.
Al elegir una silla ergonómica, debe considerar cuánto la usará y qué hará en ella. Por ejemplo, si tiene que sentarse durante largos períodos de tiempo, es mejor seleccionar uno que ofrezca reposacabezas o soporte lumbar. También debe asegurarse de que los reposabrazos estén acolchados y que la silla sea lo suficientemente alta para adaptarse a su altura.
Además de las características descritas anteriormente, la mejor silla de oficina ergonómica debe tener apoyabrazos ajustables, un respaldo reclinable y un sistema de control de tensión sensible. La última característica es especialmente importante porque muchas sillas de oficina tienen sistemas de control de tensión que no hacen mucho o requieren que gire la palanca 20 o 30 veces para sentir la diferencia.